El Ayuntamiento de Maó estudiará las alternativas que han planteado los padres para ubicar el nuevo Conservatorio de Música. Y se avanza, igualmente, con la propuesta de la Sala Augusta. El Govern está trabajando en un documento que resolverá si es una opción adecuada o no para esta sede. El equipo de gobierno se marca un plazo máximo de entre cuatro y cinco meses para decidir.
El pleno municipal aprobó este jueves una propuesta de acuerdo a través de la que el Ayuntamiento pide a las partes que se valoren todos los factores -inconvenientes y ventajas- de ubicarlo «en la Sala Augusta o a cualquier otro lugar de los planteados por la Apima y el Consell Escolar, siempre que sean técnicamente viables». La decisión, según la titular de Educación, Laia Obrador, supone continuar con el proceso de participación ya iniciado. La propuesta nace de una moción del PP a la que el equipo de gobierno hizo una contrapropuesta, aprobada de forma unánime.
La alcaldesa, Conxa Juanola, aseveró que «30 años son muchos y ya es hora de que tomemos decisiones y dejemos de dar pasos hacia adelante y hacia atrás». Reflexionó que el Ayuntamiento «es un aliado necesario, no un enemigo, que quiere solucionar el problema». Consideró que hay propuestas que tienen difícil encaje, pero se valorarán para poder llegar a una decisión con la comunidad educativa.
El concejal del PP Simón Gornés avanzó que «aceptaremos lo que se derive del informe técnico, siempre que esté bien hecho», a lo que Obrador replicó que «nunca aceptaríamos un informe que no se ajuste a las necesidades».