El rechazo a la construcción del emisario submarino de Son Parc ha llegado a las instituciones europeas, con la denuncia presentada por la asociación de comerciantes ante la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea (CE). Este colectivo, después de manifestar su oposición al proyecto ante el Ayuntamiento e incluso de recoger firmas contra el mismo, optan por acudir a Bruselas para ser escuchados y reclaman la paralización de la obra prevista.
La denuncia se argumenta en el incumplimiento, por parte de las autoridades españolas, de la Directiva 92/43/CEE, relativa a la conservación de los hábitats y de la flora y la fauna silvestres; de la Directiva 2009/147/CEE, relativa a la conservación en el Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y en la Zona de Especial Protección (ZEPA) «ES 5310070» Punta Redona-Arenal d'en Castell.
Los hechos que ahora se exponen ante la CE han sido reiteradamente criticados tanto por los comerciantes como por los residentes en la urbanización de Son Parc, en Es Mercadal: la construcción de un emisario submarino de una longitud de dos mil metros (900 enterrados y 1.100 descubiertos) con cinco bocas de difusión perteneciente a la depuradora de Addaia, que construye el Gobierno central. Dicho emisario submarino pasaría por el arenal de Son Saura (Son Parc), Cala Pudenta, en zona reconocida comoLIC. La asociación entiende, y así lo transmite a la CE, que los organismos competentes incurren en el incumplimiento de la normativa comunitaria ya que el proyecto puede tener efectos negativos en la zona.
"Si la investigación apuntara a un posible incumplimiento de la legislación pertinente de la UE, la Comisión, como garante de los Tratados, adoptaría las medidas adecuadas, entre las que podría incluirse la apertura de procedimientos formales de infracción"