El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Maó (Ara Maó y PSOE) ha recuperado la antigua iniciativa de dotar a la ciudad con una segunda piscina pública cubierta, que permita reducir la saturación que sufre la actual desde hace ya muchos años. Los presupuestos municipales de 2017 incluyen una partida de 15.000 euros dedicada a la elaboración del proyecto técnico, con la esperanza de que se pueda ejecutar en los años siguientes.
El concejal de Deportes, Carlos Montes, explica que la segunda piscina se ubicaría justo al lado de la actual, donde en estos momentos se encuentra el campo de fútbol 7, ya que este no cuenta con muchos usuarios. Sería lo que el concejal denomina un «vaso de enseñanza», es decir, una piscina de menores dimensiones, de inferior profundidad, especialmente orientada para actividades como la gerontológica o la prenatal. El proyecto incluiría unos vestuarios tanto para la piscina como para los usuarios de la pista de atletismo, y el presupuesto estimado inicialmente se situaría entre los 400.000 y los 500.000 euros. «Las obras empezarían, si se puede, en 2018», comenta cauto Montes.
En estos momentos la única piscina pública de Maó, la del Polideportivo, está cerrada y en obras desde agosto. Esta circunstancia afecta a sus alrededor de 400 usuarios diarios, una cifra elevada que complica mucho la planificación del uso de la misma, con una evidente sensación de saturación.
Con servicios minimos y dejandolo todo en manos privadas se asegura la precariedad del servicio en aras del beneficio industrial aunque en este pais son muy listos y solo privatizan aquello publico que da beneficios. El problema es que lumbreras como el de mas abajo no se dan cuenta y su inocencia le hace escribir cosas absurdas. Para mas inri en un alarde de soberbia llegar a permitirse decir de que me quejo yo, como si lo supiera.