Ocho años después de que la exconcejala del Ayuntamiento de Ciutadella, Antonia Salord, solicitara doce expedientes disciplinarios urbanísticos y no pudiera explicar el paradero del incoado por obras ilegales a un delegado sindical de la Policía Local, el caso volverá a juicio el día 30 de este mes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma.
La vista se traslada a Mallorca porque esta vez la exconcejala será juzgada por un jurado popular, al considerarse un presunto delito de corrupción política y a petición del fiscal. Salord está acusada de un presunto delito de infidelidad en la custodia de documentos, contemplado en el Código Penal.
En mi opinión la honestidad de UPCM forzó a la derechona codiciosa, egoísta y oscura a mostrarse sin su careta pepera. Así los Brondo, Salord, Cardona… perpetraron el acto de transfuguismo que dio con todos ellos en el autodenominado grupo mixto. Noticias como la de ahora, donde -lejos del “mea culpa”- hay quien arremete contra UPCM y su efectiva oposición a la relajación y corrupción un día instaladas en Ciutadella, son la preocupante muestra de cómo esa derechona meapilas e impía sigue coleando y en escena, sin duda, con su careta pepera. ¡Lástima! Pero como no todo puede ser malo en esta vida, tenemos la suerte de que UPCM sigue trabajando por Ciutadella. ¡Ánimo y suerte! Es mi deseo para Joan Triay y su equipo.