Niegan que su grupo político, Junts per Lô, filtrara el hallazgo del informe de Telecomunicaciones cuya ausencia motivó la anulación del Plan General de Alaior, se sienten protagonistas de «una cortina de humo» para eludir responsabilidades por parte del gobierno del PP y añaden que éste les ocultó que el Consell había reclamado documentación de los años 2005 y 2006 que en el Ayuntamiento, denuncian, nadie buscó.
Los concejales Llorenç Pons Llabrés, Maria Camps y Eulàlia Torrà declararon este sábado, tras las críticas de la alcaldesa Misericordia Sugrañes hacia la portavoz del grupo, que «nos ocultaron información de que el Consell había reclamado explícitamente documentación de 2005 y 2006, que tardaron cuatro meses y medio en remitir» y además de manera incompleta, aseguran, porque «solo enviaron los documentos de 2007». Si hubieran revisado los ejercicios anteriores, recuerdan los ediles de la oposición, se hubiera evitado la anulación del Plan General, con las consecuencias urbanísticas que conlleva, y el pleito posterior.