Autoridad Portuaria de Balears, atendiendo a una petición del Ayuntamiento de Maó, ha dado una respuesta a las voces que critican la aplicación de los aparcamientos de pago, con zonas azul y naranja, en la totalidad de los muelles. Lo ha hecho incluso antes de que esta medida se empiece a aplicar. El ente gestor de la rada está acondicionando estos días el solar de Cala Figuera, que hasta hace unos años ocupaba la empresa CLH, para habilitar allí un aparcamiento de carácter provisional y gratuito con capacidad para albergar 90 vehículos, según confirmaron ayer fuentes que han participado directamente en el proceso.
Además, el tramo de vial que une las inmediaciones de la Costa de Corea con el propio solar de Cala Figuera pasó ayer mismo a ser de un único sentido, de salida de los muelles. Es decir, los conductores que vienen del Fonduco no tienen más remedio que subir hacia la cuesta que lleva a la carretera de Es Castell. Con esta medida se gana un espacio que ha permitido habilitar 25 plazas más de estacionamiento gratuito en el margen derecho de este tramo, justo debajo del acantilado. Y en el margen izquierdo, junto al mar, se ha pintado sobre el asfalto un carril específico para peatones, con el objetivo de que las personas que han dejado el coche en el solar de Cala Figuera puedan acceder cómodamente al Moll de Llevant. Se reforzará también la iluminación de estos espacios.
En breve
Los planes de Autoridad Portuaria de Balears, según las mismas fuentes, son poder abrir el aparcamiento de 90 plazas en los próximos días. De este modo, coincidirá prácticamente en el tiempo, o incluso se avanzará, con la entrada en vigor de los aparcamientos de pago en las alrededor de 400 plazas de estacionamiento que existen en los muelles. Ayer estaban instaladas las bases de los parquímetros, que están a la espera de cuestiones técnicas para ser activados. En principio, los aparcamientos de pago son hábiles entre el 1 de junio y el 30 de septiembre.
La idea de habilitar una bolsa de aparcamientos en el puerto de Maó no es nueva en absoluto, ha ido apareciendo en distintos momentos de diferentes mandatos ante los problemas endémicos de movilidad rodada que presentan los muelles, sobre todo cuando se alcanza la temporada alta. En determinados días, estacionar en el puerto es una misión absolutamente imposible, pese al alivio que ha convellado para ello la instalación del ascensor, que ha generado la costumbre de dejar el coche en el Passeig Marítim.
En el último Consell Municipal de Port surgió la propuesta de un parquing en Cala Figuera, que el presidente de Autoridad Portuaria de Balears, Joan Gual de Torrella, no confirmó ni descartó. No obstante, Puertos lleva ya algunos días trabajando junto al Ayuntamiento de Maó en esta iniciativa. De hecho, la semana pasada el concejal responsable del Puerto, Héctor Pons, anunció en declaraciones a este diario que la implantación de las zonas azul y naranja iría acompañada de algún tipo de medida complementaria. En este sentido se han orientado las gestiones del equipo de gobierno municipal, que formalizó ante Autoridad Portuaria una petición en este sentido, y que finalmente se ha visto atendida.
Gracias alcalde y puertos por hacernos meternos por dentro de mahón y molestar y contaminar a los vecinos del Camí des Castell para ir de un lado para otro del puerto con lo fácil que era antes… Tic-tac