Pere Moll recibió la noticia de su expulsión del partido media hora antes de que se difundiera a los medios. «Es una decisión que asumo pero no comparto. Continuaré trabajando igual, al fin y al cabo siempre he sido más ciudadano de mi pueblo que militante radical del partido», fue su valoración a los pocos minutos de conocer su despido del PSOE por boca de la presidenta de la Gestora.
Sin embargo, con el expediente de expulsión pendiente solo del visto bueno de la federal, el partido le pidió la semana pasada un último favor, que los concejales que han de sustituir a los tres que se van -la gestora ya conocía entonces su decisión- renunciaran a su derecho a ser concejales y facilitaran el acceso a Pere Riudavets y a Joan Sánchez. Estosfiguran en los puestos seis y siete de suplentes en la lista, lo que obligaría a que al menos cinco de los anteriores les cedieran ese derecho. Pere Moll lo planteó a los cinco siguientes de la candidatura, afines a su posición, y no la aceptaron, «en absoluto, fue la respuesta», explica.
El alcalde lamenta la fecha en la que se ha hecho pública la noticia de su expulsión hace meses anunciada. Llega a ocho días de las fiestas, que presidirá como caixer batlle, «quería acabar el mandato como PSOE y no me han dejado, pero siempre he sido el mismo, continuaré igual», sin concejales que asuman la gestión de algún área, mañana se cumplen dos meses de esta situación, que ha acabado con la paradoja -de gran comprensión en el ámbito local- de delegar en el portavoz del PP, Ramón Verdú, las funciones de concejal de fiestas.
No sabe si finalmente habrá moción de censura, ya que el escenario cambia con la dimisión de tres concejales socialistas, «ni la espero ni la descarto», afirma y tampoco ha decicido recurrir su expulsión del partido, «lo estudiaré con el abogado», contesta.
Moll también agotó su última oportunidad de defensa para seguir en el PSOE en la breve conversación mantenida con Francina Armengol, «creo en tu capacidad e influencia, ven a Es Migjorn y habla con la gente, no te creas todo lo que te han dicho», fue el triple mensaje que lanzó.
Habla con la gente...Francina tiene otras cosas en que pensar, malabarista de los escaños...Migjorn le queda borroso y lejano.