En los últimos cuatro meses el Consell ha recibido 186 peticiones de inscripción de viviendas para su alquiler turístico, lo que supone un incremento significativo, por encima del 50 por ciento más, respecto a las 110 que se dieron en el mismo periodo del año anterior. No obstante, la entrada en vigor este martes de la moratoria, implícita con la publicación de la nueva ley, no ha tenido un efecto llamada de última hora, en las últimas semanas, indican desde la Conselleria de Ordenación del Territorio. Sí se produjo un mayor repunte en abril, cuando se aprobó en el Parlament el proyecto de ley de regulación de la actividad. En Mallorca solo entre mayo y junio se cursaron unas 1.500 peticiones, y han superado ya este año el total de solicitudes de 2016, con 2.700.
La presidenta y consellera de este ámbito, Susana Mora, explica que el Consell está a la expectativa de ver cómo acaba el articulado de la nueva ley, que se modificará tras las divergencias surgidas entre Podemos y el Govern respecto al artículo 49, que afecta a los edificios plurifamiliares.
Mora asegura que los partidos que integran el equipo de gobierno insular tienen ya acordada una propuesta de zonificación del alquiler turístico, y que su intención era haberla enviado ya a los ayuntamientos para trabajar en una propuesta definitiva. No obstante, las divergencias surgidas en el Parlament han obligado a aplazar este paso a expensas de ver cómo quede la ley. La idea inicial ha sido también consensuada con los técnicos que participan en la revisión del Plan Territorial Insular.
Susana Mora explica que Menorca no parte de la misma realidad que Palma o Eivissa, lo que permite al Consell trabajar con mayor prudencia, sin tantas urgencias ni contundentes posicionamientos de partida. Las intenciones del equipo de gobierno son contar con una reglamentación cerrada a finales de año, para no prolongar demasiado la moratoria