El gigantesco «A» recaló en el puerto de Maó en la noche del viernes y la abandonó este sábado pasadas las dos de la tarde. Su escala duró menos de 24 horas pero bastó para ser la atracción náutica del día. Al abandonar la rada puso rumbo de nuevo hacia la costa sur, donde se le pudo ver navegando por la zona de Es Canutells.
Durante el tiempo que estuvo en Maó la tripulación del megavelero aprovechó para hacer limpieza. A las 7 de la mañana en Cala Figuera los trabajadores del «A» descargaron en un barco auxiliar bolsas de residuos orgánicos. Alrededor de 1,3 toneladas que recogió con un camión y gestionó la empresa Triatges Menorca.
Carpas y hamacas en Cala Escorxada
El barco de lujo había sido visto antes en Ciutadella y en algunas calas de la costa sur como Escorxada, donde la tripulación montó carpas para que los ocupantes del yate pudieran descender a la arena, tomar el sol y nadar como el resto de bañistas.
Bonita la estampa de este velero o megayate, no dejara indiferente seguro.