Las mujeres residentes en los municipios del levante menorquín –Maó, Es Castell y Sant Lluís– protagonizaron el año pasado, según los últimos datos publicados por el IB-Salut, más del 60 por ciento de las interrupciones voluntarias del embarazo practicadas a residentes de Menorca en centros –tanto públicos como privados– de Balears. En total fueron 69 abortos, más del doble de los 31 practicados a mujeres residentes en los municipios de Ponent –Ciutadella y Ferreries–, mientras que en la zona centro, Alaior, Es Mercadal y Es Migjorn, se registraron doce.
El análisis estadístico de las interrupciones del embarazo de los últimos doce años hecho público por la Conselleria de Salud, que tiene en cuenta los casos en función de las zonas básicas de salud de las gestantes, muestra cómo ese mapa insular del aborto no es coyuntural, sino una realidad consolidada en el tiempo.
En ese periodo, los centros públicos y privados de Balears realizaron un total de 1.270 abortos a menorquinas, 764 de los cuales, el 60,15 por ciento, se practicaron a mujeres adscritas a los centros de salud Dalt Sant Joan y Verge del Toro de Maó, mientras que en los centros de salud del Canal Salat (Ciutadella) y Ferreries el número acumulado en los últimos doce años es de 374; y en el de Es Banyer (Alaior), de 132.
Por habitante
La preponderancia de casos en la zona de Llevant no parece responder únicamente a la mayor presencia de población ya que, si se atiende al número de tarjetas sanitarias registrado en cada uno de los centros de salud, se observa como los de Maó dan servicio a 41.200 usuarios, algo más del 48 por ciento de la Isla, mientras que en la zona de Llevant se concentran más del 60 por ciento de los casos.
Esa realidad queda patente analizando un valor directamente comparable como la tasa de abortos por cada 1.000 habitantes. El centro de salud de Menorca con el índice más elevado de interrupciones del embarazo es el Dalt Sant Joan de Maó. En 2016 esa tasa alcanzó el 9,2 una cifra que dobló la media del Canal Salat, 4,3, y superó la de Ferreries, 8,6, aunque se quedó muy lejos de la registrada en algunos barrios de Palma como Emili Darder que, con 33,5 abortos por cada mil habitantes, lideró el ranking balear, donde la media se sitúa en 12,8.