Maó cuenta desde este miércoles con 21 puntos de medición de la calidad del aire distribuidos en distintos lugares del municipio, sobre todo en aquellos donde por razones de tráfico, actividad industrial y de transporte se producen más emisiones contaminantes a la atmósfera.
La campaña, impulsada por la Conselleria balear de Territorio, Energía y Movilidad en colaboración con el Ayuntamiento de Maó, se prolongará hasta noviembre, ya que cada cuatro o seis semanas los medidores cambiarán de ubicación para obtener una "radiografía bastante precisa de la calidad del aire en Maó", ha declarado el conseller Marc Pons.
El titular de Energía ha tranquilizado a la población sobre los niveles de polución y la calidad del aire existente pero, ha añadido, "necesitamos tener muy clara la información en la que se mueve en la ciudad de Maó, por su característica en la isla de Menorca y especialmente por la central productora de energía Endesa, y tener un control exhaustivo de las emisiones y de la calidad del aire".
Por su parte, la alcaldesa de la ciudad, Conxa Juanola, ha asegurado que "esta campaña forma parte de la preocupación que tenemos por conocer cuál es la realidad de nuestro municipio en relación a la contaminación emitida por la central del puerto o por el tráfico en los momentos punta de la temporada y a partir de esta información objetiva y científica poder diseñar las políticas encaminadas a solucionar este problema e ir avanzando hacia otro modelo energético".