El aumento mamario es la primera intervención quirúrgica «con diferencia» que más se solicita en la Unidad de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética de la Red Asistencial Juaneda en la Isla. Las mujeres menorquinas acuden para ponerse más pecho y también, por este orden, para realizarse liposucciones (extraer la grasa subcutánea, sobre todo del abdomen y de las 'cartucheras') y someterse a abdominoplastias. Esta última operación consiste en remodelar el abdomen, eliminar la grasa y la piel sobrantes y reparar el músculo, explica el doctor Marco Romeo, y está especialmente indicada para recuperar la figura tras el embarazo.
Por su experiencia como cirujano plástico en la Clínica Juaneda de Menorca, el médico señala que un 90 por ciento de sus pacientes son mujeres. Por una cuestión cultural «están mucho más mentalizadas para cuidar su cuerpo» que los hombres, asegura, pero ellos también pasan por el quirófano: los menorquines se realizan sobre todo liposucciones y cirugía de párpados, es decir, se quitan grasa sobre todo del abdomen y rejuvenecen su mirada eliminando la piel sobrante de los párpados (blefaroplastia).
El doctor Romeo ofrece este jueves (20.30 horas) una charla en el restaurante Cittadella (antiguo Oristano) junto con la especialista en medicina estética (no invasiva) de Juaneda, la doctora Alicia Escamilla, ya que su trabajo se complementa. La conferencia abordará los «Falsos mitos y realidades» en torno a la cirugía y la medicina estética y busca «aclarar algunos tratamiento» así como informar sobre los últimos avances técnicos que permiten mejorar resultados y reducir el riesgo de este tipo de intervenciones, señala el cirujano. Sin duda uno de los más importantes «aunque es menos percibido por la gente» es el de la anestesia. «Entrar con una buena valoración preoperatoria supone un gran avance en seguridad», asevera Marco, ya que además la anestesia general es una de las cuestiones que despierta el temor de quien piensa en operarse.
También hay novedades en técnicas como el relleno graso, que se usa para el aumento de volumen en mamas, gluteos o rostro, tanto en cirugía estética como reparadora, con mejoras en seguridad y «de éxito, ya que ahora se aprovecha entre un 75 y un 80 por ciento de la grasa que se extrae» del propio cuerpo del paciente, generalmente de abdomen y caderas.