Maó, y en concreto su polígono industrial, concentra una parte muy importante de la actividad comercial de la Isla. De los 137 grandes establecimientos comerciales (más de 400 metros cuadrados) registrados en el documento del avance del plan director sectorial que prepara el Consell, 52 están ubicados en este municipio (38 por ciento) y, de ellos, 49 en Poima.
Ciutadella cuenta con 38 establecimientos de este tipo (27 por ciento), con una incidencia mucho menor de su polígono industrial (14). Las dos ciudades de los polos de la Isla acumulan así el 65 por ciento de estas tiendas, dos de cada tres. En cuanto a superficie total ocupada por esta oferta, el porcentaje de Maó sobre el total de la Isla sube hasta el 40 por ciento. La tendencia es a subir. De las doce licencias de apertura de locales de este tipo concedidas entre 2010 y 2015 (la suspensión cautelar de licencias comenzó en enero de 2016), nueve han sido para establecimientos de Maó, a los que hay que sumar el Decatlhon cuyo permiso de obras llegó después tras esquivar la moratoria por los pelos, y tres para Ciutadella.
La concentración de actividad comercial es incluso más elevada si se consideran los resultados de la encuesta de hábitos de compra recogida en el avance. Aproximadamente la mitad de las personas que han respondido el cuestionario indican que optan por tiendas de Maó. En el caso de los productos básicos el porcentaje es del 47 por ciento (11 por ciento en Ciutadella, un tercio en otros municipios en los que residen), solo con ligeras variaciones en cuanto al resto de productos y a las compras excepcionales.
De hecho, una de las principales conclusiones del estudio elaborado por la empresa Cotesa es la concentración de la actividad comercial en Maó y Ciutadella, con especial relevancia de los centros históricos y de los polígonos, lo que conlleva numerosos desplazamientos en vehículos.