Los hoteles de interior son los que más se están librando de la caída en la llegada de turistas en el inicio de temporada. Según los datos hechos públicos ayer por el Institut d'Estadística de Balears (Ibestat) este tipo de oferta de alojamiento cerró el mes de mayo con un importante aumento, del 56 por ciento, en el número de pernoctaciones, una realidad que también se ha vivido en los agroturismos, donde, al contrario que en los establecimientos hoteleros tradicionales, ese indicador ha ido al alza.
También se contempla un comportamiento diferente en el caso del grado de ocupación de esta oferta minoritaria pero en auge. Mientras en los hoteles convencionales la caída de la ocupación ha sido de 4,06 puntos porcentuales, en los establecimientos de interior también se ha producido un descenso, pero mucho menor, de 1,66 puntos en relación a mayo de 2016, aunque se sitúa por debajo del 50 por ciento.
En términos de ocupación, los agroturismos no han podido resistir de la misma forma. En el primer mes de la temporada, la ocupación se ha quedado en el 34 por ciento, cuando el año pasado alcanzó el 45,82 por ciento. Este análisis tiene un matiz. El año pasado el porcentaje de establecimientos abiertos fue del 83,79, mientras que en este ha alcanzado el 86,48 por ciento.
Apartamentos
La amplia oferta de apartamentos turísticos en Menorca es la que ha registrado peores cifras de ocupación al cerrar mayo con en una media del 30,01 por ciento, 2,22 puntos porcentuales menos que en el mismo mes de 2017, aunque por encima de la cifra registrada en 2016. En cuanto al número de pernoctaciones, los apartamentos registraron en el primer mes de la temporada 131.026, 19.681 menos que en mayo de 2017, una caída del 13 por ciento. Se estima que en el mes pasado el número de plazas ofertadas fue un 6,9 por ciento inferior a la del año anterior.