La compañía Meliá Hotels insta al Ayuntamiento de Alaior a no demorar la concesión de la licencia municipal para llevar a cabo la reforma proyectada en el complejo Milanos-Pingüinos de Son Bou. Manifiesta su rechazo frontal a la suspensión de licencias en esta zona porque "lejos de dar una solución a la situación actual de Son Bou, significará su cristalización definitiva, sin que pueda materializarse la modernización del establecimiento hotelero, con la pérdida que ello conlleva".
Alude al "cambio del modelo de explotación y eliminación del todo incluido, atracción de clientela de mayor poder adquisitivo, creación de nuevos puestos de trabajo, incremento de la recaudación tributaria de las distintas administraciones, beneficios para la actividad y comercios locales".
La empresa de la familia Escarrer niega la mayor: los hoteles Milanos-Pingüinos no están fuera de ordenación. Subraya que "licencias de reforma otorgadas en el pasado, la licencia de actividad, las propias cédulas y certificados emitidos por el Ayuntamiento, así como el Plan General vigente, del año 1994, recogen la edificación existente, sin que conste observación o consideración alguna de fuera de ordenación". A continuación añade que "todo parecen ser presunciones y subjetividades carentes de base legal alguna".
Meliá Hotels subraya que "tiene reconocida la totalidad de la superficie edificada" y lamenta "la causa o el origen del trato diferencial, por no decir discriminatorio, que esta Corporación da a la solicitud presentada por nuestra compañía".
Concluye que se ha producido una "demora injustificada de los trámites, todo ello en perjuicio de esta compañía; retraso que parece pretender extiende en el tiempo por más de un año sin base legal alguna, que coincide con un periodo muy relevante a nivel político".
Anuncia la empresa hotelera que ejercitará acciones para defender sus derechos y advierte que "la reticencia a otorgar una licencia que por derecho corresponde a esta compañía lo único que puede traer como consecuencia es perpetuar una situación que todo Alaior ha heredado del pasado".
Rechaza "el bloqueo institucional al que el Ayuntamiento nos aboca a todos" y recuerda que Meliá Hotels "no fue quien edificó estas construcciones" y lamenta que "ignoran incomprensiblemente que hemos dado alternativas, social y económicamente viables para su adecuación".
No digan más, seguiremos siendo los últimos de Baleares por muchos años