El primer año de vigencia de la ampliación de la compilación del Derecho Civil de Balears ha supuesto en Menorca un ahorro fiscal de 4,3 millones de euros en 165 transmisiones de bienes en vida de padres a hijos por valor de unos 50 millones.
Así lo ha detallado, el conseller balear de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, en una rueda de prensa junto a la presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora.
De estas donaciones, 78 corresponden al 2017 y 87 de este año, hasta el mes de septiembre y el ahorro medio es de unos 26.000 euros por cada donación de inmuebles a favor de descendientes.
La reforma, aprobada en el Parlament gracias a una propuesta de Més per Menorca, supuso que los pactos sucesorios por definición y la donación universal se aplicasen también en Menorca. Esta figura jurídica permite dar en vida a los hijos, a cambio de renunciar a la legítima, con una tributación propia de las sucesiones.
Las principales ventajas de equiparar las donaciones con definición a las condiciones de la sucesión hereditaria son que la persona que recibe el bien no lo tiene que incluir como beneficio patrimonial en su declaración de renta y aplicar a la donación el tipo aplicable a las herencias que es del 1 % para los primeros 700.000 euros de donación.
Por ejemplo, la donación en condiciones normales de un piso valorado en 120.000 euros, antes de incorporar el cambio normativo, suponía liquidar en concepto de impuestos unos 15.000 euros. Con la donación con definición solamente se pagaría 1.200 euros de impuesto de sucesiones, trece veces menos.