La diócesis de Menorca gestionó en 2017 un presupuesto de 2.812.466 euros, cantidad que un 71 por ciento, concretamente 2.007.909,45 euros, procedió de las aportaciones de los fieles. Por su parte, la conservación de edificios y los gastos de funcionamiento fue el capítulo de mayor cuantía entre los gastos ordinarios, por un importe de 1.171.804 euros, según ha informado el ecónomo diocesano Joan Mir.
Las colectas y las suscripciones de los fieles representaron el pasado año unos ingresos de 1,1 millones. A esta cantidad hay que sumar unos 865.000 euros que fueron aportados por el Fondo Común Interdiocesano (FCI), que se nutre de las aportaciones personales a través del Impuesto de Renta de las Personas Físicas (IRPF). En este sentido, Joan Mir ha constatado que la aportación del FCI está regulada por determinados parámetros, como el número de parroquias y de sacerdotes en activo, entre otros.
Las visitas guiadas a la Catedral de Menorca, en Ciutadella, y a la iglesia de Santa Maria, en Maó, así como determinadas subvenciones públicas, conforman el capítulo de ingresos corrientes, dotado de 624.000 euros. Mir señala que la diócesis es consciente de la necesidad de poner en valor su patrimonio arquitectónico y artístico, dentro del denominado turismo cultural y religioso, lo que a su vez implica la contratación de personas cualificadas para llevar a cabo estas iniciativas.
Además, casi 20.000 euros procedieron de herencias y legados de personas que valoraron la función espiritual y asistencial de la Iglesia menorquina.
Gastos
La conservación de los edificios religiosos y los gastos de funcionamiento se llevaron la mayor parte de los gastos ordinarios, con casi 1,2 millones, que también incluyó unos 200.000 euros en concepto de amortización de préstamos.
En segundo lugar, destacaron los casi 600.000 euros en acciones pastorales y asistenciales a través de los diferentes secretariados y delegaciones parroquiales de Caritas.
Unos 535.000 euros se destinaron a los sueldos de presbíteros, religiosos y personal seglar, con los correspondientes pagos a la Seguridad Social.
Este fin de semana se celebra el Día de la Iglesia Diocesana, un motivo para que la diócesis presente sus datos económicos y explicva a qué destina sus recursos.