El Ayuntamiento de Alaior será el propietario del antiguo polvorín y de la totalidad de las propiedades militares de la zona del Barranc d'en Rellotge, próxima a las canteras de Santa Ponça, después de haber logrado la cesión gratuita por parte del Ministerio de Defensa de unos terrenos que, incluido el camino de acceso –que pasará a formar parte de la red de caminos rurales del municipio–, tienen una superficie estimada superior a los 55.000 metros cuadrados.
Desde el equipo de gobierno de Alaior subrayaron ayer que la cesión a título de gratuidad es fruto de las gestiones realizadas personalmente por la alcaldesa, Misericordia Sugrañes, y pondrá fin a una antigua reivindicación «retomada y relanzada en los últimos años por el equipo de gobierno», la de hacerse con la propiedad de la zona, desafectada por el Ministerio de Defensa en el año 2000 y que a principios de la década fue enclave recurrente de las llamadas fiestas rave.
Según informaron ayer desde el Consistorio, el acuerdo es firme y ha recibido el visto bueno del Consejo Rector del Instituto de la Vivienda y Equipamiento de la Defensa (Invied), órgano dependiente del Ministerio, que ya ha elaborado un primer borrador del convenio a través del que se materializará el traspaso de cesión.
Está previsto que la cesión gratuita, a efecto del mantenimiento, conservación y custodia de una zona degradada por el desuso cristalice finalmente con la firma de la anotación registral en un plazo máximo de tres meses, teniendo en cuenta que el convenio deberá ser suscrito por el secretario de Estado de Defensa.