El puerto de Maó vivirá este año una auténtica revolución en materia de iluminación. La Autoridad Portuaria de Balears ha sacado a concurso –abierto hasta el 26 de febrero– las «actuaciones de mejora de la eficiencia energética del alumbrado público» de los muelles de la rada mahonesa, un ambicioso proyecto que, entre otras medidas, incluye la instalación de 395 nuevos puntos de luz, entre luminarias y proyectores, y la retirada de 261 viejos equipos con un coste global estimado de 1,6 millones de euros, el importe base de la licitación de unos trabajos que tienen una duración prevista de cinco meses.
El objetivo es en primer lugar dar un salto cualitativo en materia de eficiencia energética y reducir el consumo eléctrico a través de tecnología LED, sistemas de gestión del alumbrado e implantación de equipos de regulación que permitan graduar la intensidad de la luz en función de la hora del día. Con la sustitución del alumbrado existente, y a pesar de que el proyecto implica el aumento general de la iluminación, se conseguirá reducir considerablemente la potencia instalada, que pasará de los 75.938 vatios (W) actuales a 22.150, un descenso que supera el 70 por ciento, con la consecuente reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
La mayor inversión se destinará a la zona de Cala Figuera y el Fonduco, donde la auditoría ordenada del estado actual del alumbrado ha determinado que existe una insuficiente iluminación de los viales, lo mismo que ocurre en la zona de la Colársega. Entre ambos muelles la Autoridad Portuaria de Balears tiene previsto un desembolso cercano a los 600.000 euros.
El proyecto, que afecta a todas las zonas de tierra competencia del ente portuario, incluye la mejora de la iluminación de las explanadas de la antigua estación marítima, así como el alumbrado –ahora inexistente– del vial que une la rotonda de entrada al puerto con la carretera de La Mola, donde se estrenarán 15 nuevas luminarias. En la zona del varadero del Cós Nou el análisis que precede al proyecto de mejora advierte que no se alcanzan los niveles mínimos de iluminación para que puedan llevarse a cabo los trabajos de reparación de embarcaciones, por lo que se instalará una nueva torre de 18 metros con proyectores.
Parte de las nuevas luminarias que se instalarán en los muelles portuarios, en concreto las de vapor de sodio a alta presión, irán equipadas con sistemas de regulación que posibilitan la reducción de intensidad en cinco niveles, lo que permitirá que alumbren hasta un 40 por ciento menos en horario nocturno, con un ahorro estimado de la potencia que supera el 18 por ciento.