El equipo de gobierno del Consell se da de margen hasta finales de este año para llevar a pleno la aprobación inicial del nuevo Plan Territorial Insular (PTI), que contra pronóstico dejó sobre la mesa antes de las elecciones con el argumento de que un periodo electoral no es el momento más adecuado para sacar adelante un plan de tanta transcendencia como el que debe regular el urbanismo menorquín al menos durante los próximos diez años.
Consensos
La presidenta del Consell en funciones, Susana Mora, aseguró que ese margen amplio no se lo conceden por no tener los informes, como denunció el PP cuando Mora anunció que dejaba sobre la mesa la aprobación inicial del PTI, sino porque quieren aprovechar este momento de impasse para explorar alguna posibilidad de obtener mayor consenso, aunque durante el proceso de alegaciones también se pueden introducir modificaciones en el texto normativo.
Una vez esté aprobado inicialmente –un trámite que se superará a la vista de la aritmética plenaria– se abrirá el periodo de exposición pública, un proceso que entre contestar alegaciones e introducir las modificaciones que se crean convenientes puede alargarse por un periodo aproximado de seis meses, por lo que, aunque evitan dar plazos fijos, desde el equipo de gobierno trabajan con la intención de que el PTI quede aprobado definitivamente durante el primer año del nuevo mandato que arrancará previsiblemente la primera semana del mes de julio.