El régimen franquista expolió una treintena de piedras de varios talayots de Menorca, para levantar un monolito a los caídos del bando golpista, ha asegurado este jueves Montserrat Anglada, arqueóloga y codirectora de las excavaciones de Cornia Nou.
El monolito, que figura en el censo aprobado por la Comisión Técnica de Memoria y Reconocimientos Democráticos del Govern para ser eliminado, fue construido en junio de 1939 en la plaza Esplanada de Maó, en el centro de la ciudad. Estas dependencias son de titularidad del Ministerio de Defensa como residencia militar de acción social.
Montserrat Anglada ha explicado a Efe que la persona que relató lo ocurrido fue Emilia Mercadal, recientemente fallecida, y quien veraneaba junto a sus padres en el predio de Torraltí, en las inmediaciones del poblado talayótico de Cornia Nou.
Según el testimonio, los «prisioneros republicanos se desplazaron al conjunto arquitectónico para extraer piedras y trasladarlas al monolito». Incluso, Anglada ha recordado una historia que gira entorno a los reclusos del régimen «uno de ellos puso en el interior de la construcción de piedra del monolito una bandera republicana».
Anglada ha indicado que tiene la certeza de que en la base del monolito se aprecia claramente que las piedras proceden de talayots prehistóricos», y que dispone de pruebas documentales que acreditan el expolio «como fotos del antes y el después». las imágenes, según la arqueóloga, confirman la sustracción de decenas de piedras ubicadas en la parte derecha del talayot».
Por su parte, el director insular de Patrimonio, Antoni Ferrer, ha confirmado a Efe que además del expoliar parte del talayot de Còrnia Nou, también se sustrajeron piedras del yacimiento arqueológico de Talatí de Dalt, y «quizás de otros».
Ferrer, que fue alumno de la desaparecida Emilia Mercadal en el Colegio Mare de Déu del Toro de Ciutadella, ha apuntado que «actualmente estaría tipificado como delito contra el Patrimonio, pero desconocemos si entonces también estaba o no penado».