Las obras de instalación de la conducción que debe llevar agua desde la depuradora ubicada en Es Castell hasta la central eléctrica de Endesa, para nutrir su nuevo sistema de refrigeración, han aparecido ya a ojos del ciudadano. A primera hora de la tarde de ayer la empresa constructora empezó a trabajar en la Avenida Vives Llull, entre Camí de Ses Vinyes y Carrer Ciutadella, unas labores que obligan a cerrar un carril de este tramo por espacio aproximado de veinte días. Allí se abrirán las primeras zanjas.
Hasta ahora las obras, que comenzaron en septiembre, se han desarrollado en la entrada de la propia depuradora. Además, se han ido marcando los espacios por donde pasarán los tubos, con rayas y números de colores sobre el asfalto. Las zanjas, claro está, tendrán incidencia sobre el tráfico rodado. Una vez acabado este tramo de Vives Llull, la empresa constructora tiene previsto iniciar los trabajos en la calle Fornells, pasando por delante del centro de salud de Dalt Sant Joan, donde también se deberá cortar un carril y desviar la circulación por las calles adyacentes.
En cuanto a las actuaciones en la Avenida Vives Llull, no en todos los tramos tendrá que cortarse la calle. En la parte entre Vassallo y Ses Vinyes sí se hará, pero no desde la calle Pedro Maria Cardona hasta Vassallo, donde las conducciones se han previsto en la mediana del vial, sin efectos sobre la circulación. Sí se cortará al tráfico un carril del vial entre la rotonda de Pedro María Cardona y la Vía Ronda.
Uno de los puntos más sensibles por donde discurrirán las canalizaciones es la Vía Ronda. Pero no habrá carriles cortados porque los tubos pasan por la mediana. Solo los trabajos en rotondas generarán alguna incidencia puntual, sin interrupción del tráfico. Se estima que los obreros se asomarán a la Ronda aproximadamente desde enero.
El resto de la obra está prevista por caminos y carreteras. Será sensible la afectación en el Camí de Trepucó, con gran tráfico escolar, donde sí se contemplan desvíos por su estrechez. En el Camí de Trepuconet y los caminos más próximos a la depuradora no será, en principio, necesario restringir la circulación, aunque sí ir dando paso alterno o establecer desvíos sin mucha incidencia. En el puerto, se tendrá que cerrar por un tiempo el vial sin salida del último tramo del Moll de Ponent, en la Colársega.