Alrededor de 1.000 euros de gasto y 17 días sin poder alquilar el vehículo es el elevado coste que ha tenido que afrontar la empresa de alquiler de coches Autos Ciutadella para recuperar el Fiat Punto que un cliente se había llevado a Catalunya incumpliendo las cláusulas del contrato que le impedían sacarlo de la Isla el pasado mes de octubre.
Este último episodio ha puesto de manifiesto la extrema facilidad que supone, aparentemente, sacar un coche de Menorca en cualquiera de las compañías navieras que conectan a la Isla con Mallorca y la Península. De hecho, para comprar el billete en Baleària o Trasmediterránea, las dos compañías que operan en Menorca, el único requisito que se solicita es insertar la matrícula, la marca y el modelo del vehículo en el momento de realizar la compra en sus respectivas páginas web.
Esta realidad que provoca indefensión en las empresas locales de alquiler va a motivar que las 43 adscritas a PIME se vayan a reunir antes de final de año para plantear a las navieras que activen algún tipo de mecanismo que permita un mayor control para evitar este tipo de actuaciones que suponen un riesgo evidente para sus negocios.