El Ayuntamiento de Maó ha anunciado que instalará un radar smile en la carretera de Binidalí, a unos 300 metros del núcleo urbano de Sant Climent, para procurar que los vehículos moderen su velocidad. Este dispositivo informará a los conductores de la velocidad a la que están circulando en un tramo donde el máximo permitido se sitúa en los 40 kilómetros por hora.
El equipo de gobierno municipal responde así a las quejas de los vecinos de la zona. Recuerdan desde el Consistorio, a través de un comunicado, que alrededor de este punto de la carretera hay unas cuantas viviendas, con niños que habitualmente circulan por los márgenes. Desde el Ayuntamiento de Maó aseguran, además, que es habitual que en este punto complicado de la carretera de Binidalí se produzcan accidentes.
Además, la Junta de Gobierno celebrada el lunes aprobó la adjudicación del suministro de radares para el control de velocidad a la empresa Etra Bonal SA, por un importe de 136.065 euros. Aportará dos dispositivos, uno de los cuales se instalará en la entrada de Sant Climent, donde ya había uno hace un tiempo, y el otro en la Vía Ronda. Las cabinas de estos radares son móviles.