El ‘Mateu Orfila', un ejemplo en el reparto de medicamentos a casa

Gabriel Mercadal, adjunto de dirección de Farmacia Hospitalaria del Mateu Orfila, ha sido ponente en el webinar nacional sobre iniciativas de innovación en farmacia hospitalaria ante la pandemia de covid-19 con la experiencia de Menorca en dispensación de fármacos a domicilio.

Este encuentro virtual, organizado por la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (Sefh), reunió a más de 500 especialistas e incluyó ponencias sobre los avances en investigación de fármacos o la experiencia en el hospital de campaña de Ifema en Madrid.
Mercadal explicó el reparto de fármacos en la Isla para pacientes con patologías de riesgo, y explicó que «el acercamiento de la medicación y la posibilidad que ofrecen las nuevas tecnologías para seguimiento y monitorización de pacientes ha venido para quedarse». De hecho, Menorca ya era pionera en el envío de medicamentos a pacientes de algunas enfermedades desde el servicio de farmacia del hospital a los centros de salud, iniciativa que continuará una vez establecida la normalidad en la atención hospitalaria y se intentará combinar con el envío a domicilio a personas con problemas de movilidad o enfermedades que afecten a su capacidad inmunológica o con un alto riesgo por infección.

Tratamientos
Preguntado sobre el avance de la investigación en los fármacos para los casos más graves de covid-19, como el remdesivir, utilizado para el ébola, el doctor Mercadal considera que «queremos correr demasiado para tener un tratamiento y que hay que esperar resultados concluyentes». Esta cautela sería extrapolable a otros antivirales o al uso de la hidroxicloroquina, que en la práctica puede tener importantes efectos secundarios, como trastornos cardíacos o hepáticos, y que explicarían las modificaciones en la pigmentación de la piel de dos médicos chinos ingresados en la UCI, cuyas imágenes han circulado estos días en prensa. La hidroxicloroquina, añade, también se está utilizando en un ensayo como profiláctico para evitar contraer la enfermedad en un grupo de profesionales de la salud voluntarios.

Por otro lado, sobre la hipótesis de que la nicotina podría tener un efecto protector, basada en que impide que el coronavirus se fije a nivel neuronal en las células del sistema nervioso por donde hipotéticamente se expande y propaga en el organismo, el estudio realizado en Francia, donde todo está por confirmar, no justificaría pensar que los consumidores de tabaco están protegidos ni fomentar el uso de parches de nicotina. Y enfatiza en la diferencia entre nicotina y tabaco, porque este último contiene, además, miles de productos tóxicos. Hay que ser muy prudente con los mensajes que se da a la población, advierte el doctor Mercadal. Pese a todo, es optimista cuando se refiere a los 400 ensayos clínicos en marcha en todo el mundo con muchísimas moléculas candidatas. Y explica que el tiempo juega a favor para tener más evidencia en los tratamientos que se están administrando, con pautas cada vez más razonadas a nivel de dosis, días de administración, etc.; así como en los protocolos de actuación ante la respuesta inflamatoria que agrava el estado de algunos pacientes. Ahora más que nunca, explica el doctor Mercadal, la investigación necesita de una visión multidisciplinar, y se muestra muy partidario de tener en cuenta el conocimiento de veterinarios expertos en este tipo de zoonosis y pandemias en el mundo animal. Por último, sobre la posibilidad de una nueva oleada de contagios en otoño, cree importante el mantenimiento de la infraestructura hospitalaria, con la dotación de respiradores y medicamentos, que ofrezca una respuesta más adecuada, eficiente, rápida y segura «porque en las primeras semanas sufrimos mucho», concluye.