Balears pide viajar sin restricción entre las Islas a partir del lunes

El Govern pedirá esta misma semana al Gobierno que, a partir del próximo lunes, se pueda viajar libremente entre las Islas incluso para hacer turismo. Hasta ahora solo está permitido viajar por motivos laborales, sanitarios o por causas de fuerza mayor, pero el Govern quiere que esto cambie a partir del lunes y se permita la movilidad total entre los distintos territorios de la Comunitat.

Lo anunció este martes el conseller de Movilidad y Vivienda, Marc Pons, durante la comparecencia parlamentaria en la que explicó la situación de la movilidad en las Islas. El Govern está preparando todo la documentación que avale esta petición y que entraría en vigor el lunes siempre que Balears pase a la fase 2 de la desescalada, algo sobre lo que parece que no habrá problemas.

Empuje al turismo

Liberar el transporte entre Islas puede suponer, además, un pequeño empuje para el sector turístico de las Islas ya que los ciudadanos de Balears podrían cambiar de isla para alojarse en un establecimiento hotelero. Esta movilidad se verá favorecida por el hecho de que, a partir de la semana que viene, aumentan las conexiones aéreas entre Mallorca y Eivissa (tres vuelos diarios) y Mallorca y Menorca (dos vuelos al día).

En los puertos también se autorizarán los viajes entre islas, pero los cruceros seguirán estando prohibidos mientras dure el estado de alarma. El conseller de Movilidad reconoció que tienen más problemas para controlar la llegada de yates privados una vez que se permita la libertad total de navegación.

Marc Pons anunció que el Govern seguirá haciendo controles sanitarios y señaló que de los 45.000 que se han hecho apenas ha habido 40 casos con posibles contagios.

Todos los partidos aseguraron que el objetivo debe ser que Balears se considere un destino seguro y por eso criticaron el mensaje que se lanza con la obligación de que los recién llegados pasen una cuarentena que además nadie controla. Antoni Costa (PP) dijo que la cuarentena es «un torpedo a la línea de flotación del turismo» y Josep Melià (PI) dijo que era «un misil». Jorge Campos (Vox) estuvo de acuerdo con la necesidad de hacer test en origen o en destino y que se lo paguen ellos.