La Conselleria de Agricultura ha decidido cerrar urgentemente, dos meses antes de que se cerrara la convocatoria, el grifo de las ayudas a inversiones de mejora agraria, una de las líneas del Plan de Desarrollo Rural (PDR) 2014-2020 financiado por la Unión Europea. Lo ha hecho después de comprobar que se habían agotado los fondos y que no solo no puede seguir atendiendo nuevas solicitudes, sino que ni tan siquiera tiene para hacer frente a todas las que están pendientes desde 2018. La situación ha sido denunciada en el Parlament por grupos de la oposición como el PP y el PI, que esta semana han visto como se tumbaban sus propuestas para reabrir la convocatoria 2020 y para conseguir fondos de otras partidas.
La diputada menorquina del PP Asunción Pons acusa a la Conselleria de Mae de la Concha de «mala gestión» y lamenta que «los profesionales del campo que ya han realizado las mejoras en renovación de maquinaria, mejora de infraestructuras y modernización de explotaciones» y que «no pueden recibir la callada por respuesta». Denuncia que los payeses que realizaron solicitudes entre 2018 y 2019 no cobrarán, extremo que desde el Govern niegan.
Desde la Conselleria de Agricultura explican que son herederos de un plan de ayudas que arrastra problemas desde el inicio y de hecho subrayan que el Govern del PP las tuvo un año y medio paradas. Afirman que durante el pasado mandato, cuando Més per Mallorca estaba al frente de Agricultura, se facilitaron los procesos para que los interesados pudieran presentarse a las ayudas, pero que no se controló el desequilibrio entre el volumen de solicitudes recibidas y los fondos disponibles.
De los 40,5 millones disponibles para esta línea de ayudas durante el periodo 2014-2020, hasta 2017 el volumen de las aprobadas y concedidas era ya de 31,6 millones. Aun así, lamentan, las convocatorias siguieron abiertas en 2018 y 2019, con 873 expedientes sin resolver que sumarían otros 16 millones anuales, más otros cuatro millones en 2020. No salen los números y ya han asumido que no todos los solicitantes podrán pagar, por lo que aseguran que priorizarán las peticiones de los profesionales del sector.
En ese sentido afirman que como en Menorca la gran mayoría de las inversiones que solicitan subvención se refieren a explotaciones agroganaderas profesionales, resulta más probable que terminen cobrando, al menos una mayoría, «casi todos», afirman fuentes de la Conselleria, aunque sin poder afirmar que lo vayan a hacer todos. De cara a la línea de ayudas que se tiene que abrir para el periodo 2021-2027, aseguran que establecerán un sistema de tramitación y pago más «ágil, ordenado y eficiente».