Ports de les Illes Balears ha anunciado que invertirá 4,2 millones de euros en el puerto de Son Blanc para mejorar la operatividad y la seguridad de las instalaciones portuarias de Ciutadella, y para que pueda acoger barcos de hasta 190 metros de eslora, atendiendo así la creciente demanda de las navieras en operar las líneas comerciales con embarcaciones de mayor eslora.
El proyecto, cuyas obras se prevé que empiecen a principios de 2022, consiste en la instalación de cuatro duques de alba (dos en el Muelle Oeste y otros dos en el Muelle Este), lo que permitirá ampliar la línea de atraque hasta los 208 y 202 metros respectivamente.
El proyecto ha sido presentado este miércoles por el conseller de Movilidad del Govern, Marc Pons, acompañado por el director general de Transporte Aéreo y Marítimo, Xavier Ramis, la gerente de Ports IB, Cristina Barahona, la presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora, y la alcaldesa de Ciutadella, Joana Gomila.
Marc Pons ha destacado en todo momento que se trata de un proyecto para mejorar la seguridad de navegación de las líneas comerciales, y no para atraer cruceros, a diferencia del proyecto frustrado del PP de 2015 centrado en acoger buques turísticos.
“La prioridad del proyecto es crecer en tráfico comercial de pasajeros y mercancías”, señalan desde Ports. Asimismo, resaltan que la capacidad de los muelles actuales “está saturada”, debido a la demanda de tráfico creciente, a la tendencia de las navieras de operar con barcos de mayor eslora y las limitaciones de los muelles por su longitud.
Desde Ports remarcan que el proyecto responde “a las indicaciones hechas por Capitanía Marítima en seguridad de navegación, maniobrabilidad y atraque de buques al puerto”. En ese sentido cabe apuntar que esta mejora permitirá atracar barcos de hasta 190 metros, cuando hasta ahora el buque de línea más habitual ha sido el Martín i Soler con 165 metros de eslora. No obstante cabe matizar que en el último año también han amarrado grandes barcos como el Hypatia de Alejandria de Baleària (186 metros) o recientemente el Mega Express de Corsica Ferries (176 metros), para los cuales se tuvo que contratar el servicio de un barco remolcador.