Con el mercado turístico nacional contenido y el extranjero desfondado, el Aeropuerto de Menorca vivió el mes pasado un julio muy atípico, con un volumen de pasajeros más propio de un abril o un octubre. A pesar de que las restricciones de movilidad finalizaron en junio, el tráfico de pasajeros en el Aeropuerto de Menorca descendió en julio un 67 por ciento respecto al mismo mes de 2019. La cifra es algo inferior a las caídas experimentadas en Mallorca, Eivissa o el conjunto de España.
Según las estadísticas divulgadas este miércoles por AENA, por las terminales del Aeropuerto de Menorca se movieron en julio 207.880 pasajeros, cifra que deja por fin atrás los guarismos residuales de abril, mayo y junio. Aún así, la cifra queda todavía muy lejos de los veranos precedentes. Son un tercio de los 638.843 usuarios del año pasado.
El movimiento de personas mediante el transporte aéreo sufrió en Menorca, como en el resto del país, un verdadero socavón. Mientras que en julio de 2019 las conexiones internacionales predominaban en el aeropuerto insular, con 369.063 usuarios procedentes de muy diversos países, en el primer mes turístico del ‘verano covid' los usuarios extranjeros se han quedado en unas exiguas 63.148 personas. La precipitación hacia casi el abismo fue del 83 por ciento.
Los pasajeros del Reino Unido se acercaron en julio del año pasado, con más de 200.000, al total de pasajeros del mercado nacional (269.780). Pero en este ‘julio covid' los usuarios británicos que han embarcado o desembarcado en la Isla se han quedado en unos mínimos 13.378. No en vano, el gobierno del habitualmente principal mercado turístico menorquín ha sido uno de los países que más difícil ha puesto a sus ciudadanos los viajes a España. Hasta tal punto ha bajado este mercado, que Italia le ha superado como principal país extranjero en las estadísticas del aeropuerto menorquín, pese a descender un 73 por ciento.
También ha fallado la diversidad. Mercados como República Checa, Suecia o Portugal, que el año pasado aportaron entre los tres sus nada despreciables 15.000 pasajeros, se han quedado prácticamente a cero por la ausencia de conexiones. Países con algo más de tradición en el estío insular, como Francia, Italia o Alemania, han reducido su emisión de turistas hacia Menorca en aproximadamente un tercio. Resulta curioso, por ejemplo, el importante crecimiento de un país secundario, en cuanto al turismo en la Isla, como Polonia.
En cuanto al mercado nacional, en este julio marcado por la pandemia mundial, el volumen de pasajeros se ha reducido a poco más de la mitad respecto al mismo mes del año pasado. La ruta que más desciende es, precisamente, la que más pasajeros aporta. Entre Barcelona y Menorca, o viceversa, volaron en julio 45.471 personas, poco más de un tercio de las 128.299 que lo hicieron el año pasado. Sirva como referencia que en enero, antes del estado de alarma, se movieron entre Barcelona y Menorca 33.313 personas, solo unas 12.000 menos que en este extraño julio.
Las conexiones con Madrid y Palma han aguantado algo mejor el tipo, dentro del contexto general de descalabro. En julio la ruta con la capital española perdió un 42 por ciento de los pasajeros respecto al mismo mes de 2019. En el caso de Palma, las cifras se quedan también sensiblemente por encima de la mitad de un año a otro, con unos 18.387 usuarios. Resulta significativo que esta cantidad de pasajeros está, incluso, considerablemente por debajo del peor mes de 2019 (enero, con 26.222) en la ruta entre islas. Por contra, conexiones españolas como Sevilla, Valencia, Asturias o Zaragoza crecen de forma relevante, aunque con cifras todavía discretas.
Son Sant Joan, el que más
El aeropuerto de Son Sant Joan de Palma lideró en julio con 1,1 millones de pasajeros el tráfico de la red de aeródromos de AENA, a pesar de haber experimentado respecto al año anterior un decrecimiento del 73,8 por ciento respecto al mismo mes de 2019. El Adolfo Suárez Madrid-Barajas, con 990.899 (-83,3 por ciento) y el Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, con 872.924 (-83,7 por ciento) se sitúan por detrás. El aeropuerto de Eivissa, por su parte, registró en julio 426.287 pasajeros, un 68 por ciento menos respecto al año pasado.
Los aeropuertos de la red de Aena registraron en julio más de 6,9 millones de pasajeros, un 76,2 por ciento menos que el mismo mes de 2019, lo que representa una significativa recuperación con respecto a junio.