El proyecto de implantación de la red de distribución del gas natural en Menorca sigue acumulando contratiempos en su tortuosa tramitación, que se arrastra desde 2015 y que todavía no ve la luz al final del túnel. El pleno de la Comisión Balear de Medio Ambiente acordó ayer el archivo de los dos expedientes relativos a las redes de distribución y plantas de almacenamiento previstas en Maó y Ciutadella, que se suma al archivo justo después del confinamiento del expediente sobre el despliegue del gas natural en la zona de Es Mercadal .
El ente de supervisión medioambiental ha considerado que vistas las diversas modificaciones que está sufriendo el proyecto para gasificar Menorca y la fecha de los expedientes, cercana a su caducidad, lo mejor es esperar a que el promotor, en este caso Nedgia, recoja todos esos cambios en un proyecto definitivo que deberá volver a ser informado por Medio Ambiente.
Cabe tener en cuenta que los expedientes que estaban sobre la mesa de la comisión forman parte del conjunto de informes que se solicitan a diversas administraciones y organismos públicos en el proceso de tramitación del proyecto, por lo que en ningún caso el archivo de los expedientes de Medio Ambiente significa que el proyecto haya sido archivado. Su tramitación sigue adelante, según confirman desde la Dirección General de Energía y Cambio Climático, y lo hace además sin renunciar a ninguna de las zonas de distribución, como se sugería desde el Govern.
Hay que recordar que la gasificación de Menorca fue adjudicada en marzo de 2015, en las postrimerías del Govern de José Ramón Bauzá, con un coste aproximado de 30 millones de euros, y supone la instalación de unos 500 kilómetros de tuberías. Ecologistas y algunos grupos políticos y administraciones locales han mostrado su rechazo al proyecto ahora que arranca el proceso de transición hacia las energías renovables.