Como aseguró hace unos meses el conseller de Movilidad y Vivienda, Marc Pons, Ports de les Illes Balears no esperará a que la Junta Local de Fornells se pronuncie al respecto para avanzar con la segunda fase del proyecto de reforma del puerto de Fornells. En principio está previsto que el Consell de Govern de este lunes apruebe la autorización previa a la tramitación del concurso público para la adjudicación de esta importante obra, cuyo presupuesto previsto ronda los 8 millones de euros y que ha generado una larga controversia política sobre todo por la construcción de un edificio en la zona del antiguo restaurante Es Pla.
Las intenciones iniciales de Ports contemplaban formalizar este paso administrativo en otoño del año pasado, con la intención de que entre febrero y junio se pudieran llevar a cabo los primeros trabajos de la obra, antes de un primer parón estival. Esto ya no será posible. Aún así, fuentes de la Conselleria de Movilidad y Vivienda, comentan que se intentarán acelerar al máximo los trámites pendientes para que algo de obra se pueda acometer antes del comienzo teórico de la temporada turística. Esta demora de unos meses obedece, explican, a la carga de trabajo de la administración autonómica a causa de la pandemia.
El desarrollo del proyecto se ha visto condicionado en la controversia. Hace unos meses, en sede parlamentaria Marc Pons supeditó el proyecto al visto bueno de la Junta Local de Fornells, pero PP y L'Entesa forzaron casi de inmediato un cambio en los estatutos de este organismo, con lo que se tuvo que disolver para aprobar los nuevos. Esta modificación deja en minoría al PSOE. Ante la maniobra, el conseller menorquín dijo que no aceptaba el juego y que el proyecto avanzaría sin aguardar a la nueva Junta Local.
De hecho, los nuevos estatutos de la Junta Local de Fornells todavía tienen mucho recorrido por delante. El alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller, explica que se esta trabajando en este documento desde la Secretaría municipal, y que podría someterse a aprobación inicial del pleno del Consistorio en febrero. Luego viene un periodo de exposición pública, análisis de posibles alegaciones y aprobación definitiva.