El GOB informó este miércoles que «centenares de personas» han presentado alegaciones a la revisión del PTI según el formulario facilitado por la entidad ecologista. Además, apunta, ha entregado un «largo documento» con propuestas para la mejora de los documentos que han pasado ya el periodo de exposición pública.
Los ecologistas solicitan, entre otras cosas, «restringir seriamente la posibilidad de disponer dotaciones sobre suelo rústico que sean de servicio de las urbanizaciones». Consideran oportuno que esto solo se pueda hacer en rústico común y con un límite de extensión.
En cuanto a los alojamientos turísticos en el campo, el GOB plantea la necesidad de regular la construcción de piscinas, de establecer una cuota anual máxima de plazas, con preferencia para las agroestancias y de que se tengan que demoler las obras que se hagan para un negocio turístico si este cesa. Para el GOB, los restaurantes solo deberían tener cabida en rústico común y en fincas con una oferta de alojamiento, entre otras cuestiones.
En materias como la conservación de los acuíferos, la entidad solicita que se contemple el uso de cisternas y de residuales cuando sea posible, lo que permitiría un ahorro muy significativo. También la utilización de pavimentos filtradores en aparcamientos de ciertas dimensiones y depósitos subterráneos reguladores de lluvia en las nuevas urbanizaciones, entre muchas otras propuestas.