Al mismo tiempo que Pedro Sánchez comunicaba el cese a los ministros afectados por la remodelación del Gobierno, la secretaria general del PSOE-Menorca, Susana Mora, comparecía en la primera reunión presencial del Comité Insular que el partido celebra desde la pandemia. Lo hacía para trasladar un mensaje optimista sobre la recuperación económica. «Menorca es la novia a la que todos quieren cortejar para salir empoderados de esta crisis, desde el turismo, la industria o la innovación», afirmó ante la militancia socialista.
Aseguró que la Isla fue pionera en su momento en la apuesta por la sostenibilidad, la diversificación, las infraestructuras y los servicios públicos, lo que la sitúa ahora en un lugar privilegiado para afrontar el futuro. La también presidenta del Consell auguró que septiembre supondrá «el fin de la pesadilla» de la covid-19 y el inicio de «una etapa esplendorosa» gracias a que «la sociedad menorquina hizo los deberes antes de esta crisis sanitaria, social y económica».
El error de Sant Joan
Mora aprovechó su intervención ante el Comité Insular, el máximo órgano del partido entre congresos, para defender el trabajo realizado en la gestión de una pandemia para la que «nadie estaba preparado» y al mismo tiempo hacer autocrítica: «Hemos afrontado esta crisis desde los valores socialistas, poniendo la vida de las personas por delante y sin olvidar la economía».
Afirmó que el PSOE ha sido «el partido del seny» frente a una oposición que busca el «cuanto peor, mejor», pero admitió que se han cometido errores merecedores de crítica. En concreto se sinceró con la organización de las fiestas de Sant Joan, por la que la opinión pública pide explicaciones: «No hemos escondido nunca la cabeza bajo el ala, la responsabilidad es de todos, pero sobre todo de los que estamos al frente», señaló.
El resultado del descontrol que se vivió esos días en las calles de Ciutadella es una incidencia acumulada de covid-19 que en estos momentos se sitúa por encima de los 800 casos por cada 100.000 habitantes. Con todo, la secretaria general de los socialistas menorquines subrayó que semejante nivel de contagios no se está traduciendo en un colapso del hospital. De hecho, explicó que las cifras de ingresados en el «Mateu Orfila» se sitúan por debajo de las registradas en la tercera ola de la pandemia, tras las fiestas de Navidad, algo que atribuyó al avance de la vacunación.
«Estamos a punto de alcanzar la inmunidad de rebaño», añadió, «los números nos avalan, pero todavía nos queda un último esfuerzo: solo desde la responsabilidad saldremos de esta».
Encargo a la militancia
Con la vista puesta en las elecciones de 2023 y ante la posibilidad de que la gestión de la pandemia pase factura en las urnas, Susana Mora pidió a los militantes que arrimen el hombro para que el PSOE recupere «el pulso a pie de calle», en alusión a la «fuerza que en 2019 hizo que la ciudadanía nos otorgara su confianza para gobernar».
Pues la novia que todos quieren cortejar se ha olvidado ducharse. Hay que pasear por Mahon y ver cómo están las calles. Da asco,suciedad, excrementos , nunca había visto una novia tan sucia. Mucho ecosistema, mucho talayot, mucha biosfera pero lavarse la cara y lo otro nada de nada