La terminal del aeropuerto de Menorca vivió ayer un colapso en la terminal ante el volumen de pasajeros que despedían sus vacaciones en 18 vuelos concentrados en dos horas. Fueron los pasajeros los que denunciaron la aglomeración al entender que había habido una falta de previsión por parte de Aena, que debió aumentar la dotación en el control de seguridad para acceder a la zona de embarque con más diligencia y sin aumentar riesgos de nervios y salud.
El tramo horario de mayor tránsito de vuelos se produjo entre las 17 y las 19 horas, con 18 salidas, nueve en cada una de las horas, lo que significa que desde al menos una hora antes se produjo una gran presión de pasajeros sobre las zonas de facturación y de embarque.
Pasajeros a la espera para subir a la primera planta y pasar el control. | FOTO: Antonio Bueno
El problema añadido es que al tratarse de una fecha de final de vacaciones, casi todos los vuelos van llenos. Una fuente de Iberia apuntaba ayer que en lo que va de mes los aviones de Madrid vienen con 200 pasajeros y salen con 150 de media.
Durante el resto de la tarde las salidas estuvieron más espaciadas. A última hora del día, entre las 21 y las 22 también despegaron ocho vuelos, de los cuales cuatro eran nacionales y los otros cuatro tenían destino europeo.
Nadie perdió el vuelo
El colapso en la terminal no incidió en el tránsito aéreo, ya que todas las operaciones se realizaron puntuales en su mayoría y sin retrasos. En la citada hora punta, entre las 17 y las 19 horas, solo se registró un retraso, imputable a otras causas.
Aena informa que ningún pasajero perdió el vuelo a causa de la aglomeración registrada a primera hora de la tarde. Considera que el problema no se originó por la programación aérea sino que la principal causa de la imagen que mostró ayer tarde la terminal y las quejas que ello propició en algunos viajeros obedece a la elevada ocupación de los aviones.
Ayer salieron vuelos con destino a más de 14 aeropuertos internacionales y siete destinos nacionales.
La programación base de una compañía aérea se presenta antes de la temporada, entre febrero y marzo se ultiman esas programaciones. Luego aena y eurocontrol autorizan o no esa programación. Lo cual no es óbice para que cualquier compañía 72 horas antes presente un plan de vuelo para operar uno o varios vuelos adicionales a su programa original. De igual forma aena y eurocontrol lo han de aceptar. ¿Aena falla? Pues alguna vez como todos fallamos. Pero lo que es evidente para aena es más importante la recaudación por alquileres de tiendas y cafeterías aunque sea a costa de reducir el espacio útil para los pasajeros. Es decir, los pasajeros no son sus clientes directos, lo son las tasas operativas que pagan las compañías aéreas, por aterrizaje, por conectar un finguer o pasarela, por utilizar un mostrador de facturación, por cada pasajero que transportan y no por respirar porque no pueden pero todo se andará.