PIME y la Asociación de Viviendas Turísticas de Menorca (Viturme) han defendido este martes que las viviendas turísticas vacacionales son el «eje vertebrador» del modelo turístico de Menorca y, por ello, critican la moratoria «impuesta» por el Govern «tal y como se ha planteado» y han apuntado que afectará de forma negativa a los intereses de la sociedad menorquina.
En esta línea, han destacado que la vivienda turística vacacional representa el 32 por ciento de las plazas turísticas que hay actualmente en Menorca. «Este tipo de alojamiento ha sido el elemento que ha ayudado desde hace 30 años a configurar un modelo turístico propio en la isla diferenciado, destinado al visitante que prefiere viajar por libre», han subrayado.
Durante un encuentro mantenido este lunes con los socios del Cercle d'Economia de Menorca, la secretaria de PIME, Maria García, y el presidente de Virturme, Javier Pons, hicieron hincapié en el hecho de que las viviendas turísticas vacacionales «no son las culpables de la supuesta e inexistente saturación de la que se habla, porque el crecimiento de estas viviendas ha sido sostenido en el tiempo y no de nueva creación»
«La cifra de visitantes del año pasado fue inferior a la de 2019 en 540.000 personas, teniendo en cuenta que solo pudieron venir turistas de julio a octubre y que si cogiéramos el mismo periodo de meses de 2019, también habrían sido 90.000 personas menos» explicó García.
En esta línea, ha remarcado que «se tendría que ser más riguroso cuando se habla de que estamos saturados» y ha apuntado que «lo que realmente ha pasado es que ha habido un mayor incremento de la movilidad porque el turista se ha dejado ver más y esto ha sido muy positivo porque ha redistribuido las rentas turísticas de manera mucho más equitativa, generando beneficios a las empresas menorquinas».
En cuanto al supuesto incremento de viviendas turísticas ilegales, el representante de Viturme ha destacado «cada vez hay menos casas sin licencia porque se ha hecho un trabajo de hormiguita que también ha ido el sentido de promover que los diversos trabajos de mantenimiento de fincas, jardines y piscinas no se hagan sin factura».
Desde PIME han criticado la moratoria ya que, según han subrayado, desde Menorca ya había un consenso general de cuál era el tope de crecimiento establecido en el Plan Territorial Insular de 2003. «Se ha tomado la costumbre en política que cuando una cosa molesta se tiene que prohibir o limitar en vez de ordenarla o gestionarla», ha dicho García, quien ha lamentado también que el Ejecutivo autonómico ha «ninguneado» a algunos sectores turísticos menorquines.
«Esta situación se tendría que reconducir, Menorca tendría que tener más peso a las decisiones del Govern y cualquier norma que se quiera imponer tendría que ir acompañada de un estudio económico sobre el impacto que puede producir», ha añadido.
De cara a esta temporada, el presidente de Viturme ha anunciado que las reservas de viviendas turísticas vacacionales «van a buen ritmo» y ha apuntado que a las peticiones del cliente nacional «que ya prácticamente han llenado julio y agosto», esta temporada también se añadirán las del mercado británico, que está alquilando en mayo y junio.