El Consell de Menorca prepara el albergue juvenil de Sa Vinyeta, en Ciutadella, para acoger a refugiados de Ucrania que lleguen a la Isla. En coordinación con el Fons Menorquí de Cooperació y la Cruz Roja, este será el lugar donde irán los refugiados a partir de este martes.
Hasta el momento, han llegado a la Isla unos 25 ucranianos que han buscado una nueva vida, mujeres y niños que escapan de la guerra. Todos ellos han sido alojados en domicilios de particulares que ya residen en Menorca.
Entre este lunes y martes, Menorca recibirá tres madres y seis hijos. Este lunes al mediodía han aterrizado al aeropuerto dos madres y tres hijos, procedentes de la capital del país, Kiev.
La consellera insular de Bienestar Social y Familia, Bárbara Torrent, ha explicado que hay un plan de actuación para acoger a las víctimas de la guerra.
«Contamos con un plan de acogida para refugiados y de un protocolo para casos de emergencia que estamos adaptando para poder atender este nuevo colectivo y ofrecerles alojamiento, manutención y ayuda para regularizar su situación», ha admitido.
El Consell había ofrecido dos plazas de la Casa de la Infancia para menores no acompañados y cinco plazas en el piso destinado a la acogida de refugiados. Viendo que el piso inicialmente habilitado se ha quedado pequeño, la administración ha decidido habilitar Sa Vinyeta hasta finales de mes.
Por otro lado, también se ha activado la Oficina de Atención a la Persona Inmigrante, a través de la cual se ofrece asesoramiento técnico y jurídico. Además, la institución había anunciado la aportación de 15.000 euros al Fons Menorquí de Cooperació para ayudar a la crisis humanitaria.
Com diu Maripili ja era hora que es consell insular moguès es cul encara de una manera molt teba, són personas que duen un sofriment damunt difícil de explicar, hi ha que viure-ho per poder entendre'l, en pensava més empatia per part des consell ja que aquestas personas necesitan altre cosa que no sigui un albergue, com diu un altre comentari altres necesitas tanto més importantes com un triste albergue, com sempre esperen sa solidaritat des poble antes de que tots ells fagin res