El solar en el que debe levantarse la nueva Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Maó ya está libre de malezas. Una empresa lo ha desbrozado esta semana por encargo de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (Siepe), dependiente del Ministerio del Interior.
Se trata de la primera intervención tangible para la nueva infraestructura policial demandada hace ya 15 años, que Interior sacó del cajón a principios de 2019. Fue en el mes de marzo cuando la entonces delegada del Gobierno en Balears, Rosario Sánchez, dijo en Maó que el Ministerio la había incluido entre los 800 millones destinados a inversiones para los próximos seis años. Quiere decir que la Comisaría de Maó no será realidad hasta el mismo 2025, cuando vence ese plazo de inversión.
Desde aquel último anuncio los avances nada habían avanzado, ya que la obra como tal no ha aparecido en los sucesivos presupuestos generales del Estado, a excepción de una primera partida de 3.000 euros, que presumiblemente es la que se ha destinado para esta actuación.
Interior destinará 3,5 millones a estas nuevas dependencias que se ubicarán en una parcela cedida por el Ayuntamiento en la calle del Campament, entre Vía de Ronda y Borja Moll.
La construcción de esta Comisaría está incluida en el Plan de Infraestructuras, ha explicado el subdirector del Siepe, Daniel Belmar, «y la limpieza del solar es un primer paso para la obra». El organismo público trabaja ahora en la memoria de necesidades, como pasó previo a la elaboración del anteproyecto.