La empresa Autos Fornells, concesionaria del servicio de bus entre Maó y Favàritx, ha confirmado este lunes que la línea se mantendrá activa, después de reconocer la semana pasada que la continuidad del bus lanzadera al emblemático faro estaba en riesgo por la carestía de conductores. A lo largo de este lunes tenían que tomar una decisión sobre este servicio que desde el cierre del acceso el pasado 1 de junio es la única alternativa para llegar a la zona sin tener que caminar los alrededor de dos kilómetros que la separan del parking habilitado.
La decisión de seguir adelante con el servicio se ha tomado, según explican, después de que un antiguo chófer de la compañía que ahora tienen otra dedicación profesional, tras leer la noticia publicada por este diario y no teniendo obligaciones laborales este verano se ha ofrecido a cubrir los trayectos. Este gesto ha sacado del apuro a la empresa, que no encontraba suficientes conductores para cubrir todos sus servicios y que había pensado en la línea de Favàritx, una de las rutas más infrautilizadas, para aplicar recortes.
Este servicio no solo permite llegar a Favàritx desde Maó, sino que también da la posibilidad de dejar el coche en el aparcamiento y tomar el bus para cubrir el desplazamiento hasta el faro.