La Vía Ronda de Maó está registrando este año un llamativo descenso en la circulación de vehículos. El mes pasado la estación de control ubicada en el punto kilométrico 1,8 de esta vía perimetral (más o menos a la altura del barrio de Malbúger) contabilizó el tránsito diario de una media de 27.755 automóviles (de todas las tipologías), 1.140 menos que en julio del año pasado y nada menos que 9.271 menos que en el año previo a la pandemia.
Eso representa un descenso del 25 por ciento en solo tres años, cuando el mes de julio dejó un registro medio diario de 37.026 vehículos, la cifra más alta contabilizada en cualquier mes de la serie histórica. De hecho si se observa la serie de los meses de julio, solo en 2020, en plena pandemia y sin apenas tráfico de vehículos foráneos o de alquiler, se observa una cifra similar, con una media 27.326 usuarios diarios.
Ese fue el primer año que el tráfico por la Vía Ronda bajó de los 30.000 vehículos diarios en un mes de julio desde el año 2009, al que se remontan las estadísticas. Ya en junio se observó un descenso del tráfico en comparación con el año pasado y mucho más acusado en relación a 2019.
Algunos factores pueden estar influyendo en ese descenso, como la instalación este año de radares en dos puntos para controlar los excesos de velocidad o la habilitación progresiva de carriles bici que discurren en paralelo a la vía que rodea el casco urbano de la ciudad de Llevant.