Santandria, en Ciutadella, contará, a partir de la temporada estival de 2024, con un nuevo hotel, que ayudará a revitalizar la urbanización con una nueva oferta turística y de calidad. Se trata de un establecimiento de cinco estrellas gran lujo, con un total de cincuenta habitaciones para cien huéspedes, cuya inversión asciende a 8.771.438 euros.
En su última sesión, la junta de gobierno del Ayuntamiento de Ciutadella aprobó la concesión de una licencia de obras a Santandria Bai SL, para levantar un hotel en el Carrer dels Anglesos, esquina con las calles Dels Alemanys y Dels Espanyols.
Los promotores han presentado en Urbanismo el proyecto básico para un hotel de categoría superior. Tendrá una superficie construida de 5.339,18 metros cuadrados, distribuidos en una planta sótano (1.883,08 metros cuadrados), planta baja (1.883,24) y primer piso (1.572,86 metros cuadrados).
Firma este proyecto el arquitecto donostiarra Juan José Arrizabalaga, mientras que Enginyers Bosch se encarga de la parte de instalaciones.
A nivel administrativo, el proyecto cuenta ya con el visto bueno de Recursos Hídricos y de Turismo, y con la licencia concedida por el Ayuntamiento a partir del proyecto básico, quedará presentar el proyecto ejecutivo. Eso será en octubre, y de forma inminente está previsto que empiecen las obras.
Aunque el inicio de los trabajos está cerca, es previsible que no sea hasta el verano de 2024 cuando el hotel pueda abrir sus puertas.
Distribución interior
Del medio centenar de habitaciones, 23 se ubicarán en la planta baja y 27 en el primer piso. Todas ellas amplias, desde 25 a 40 metros cuadrados.
A nivel de calle estará la recepción, el bar y el restaurante y zonas de comunicación, además de los dormitorios y varias piscinas. Y en la planta superior, el resto de habitaciones y otras zonas de comunicación.
Por último, en el nivel subsuelo, los clientes encontrarán una zona deportiva, spa, salas de reuniones y el garaje para 17 coches y bicicletas. Y habrá también allí las cocinas, las instalaciones principales del hotel, servicios para el personal, lavandería, comedor, vestuarios, almacenes y una sala técnica.
Cuando teníamos fábricas todos éramos felices, teníamos acceso libre a nuestras playas, calles, plazas etc. Ese anhelo nos desespera gratamente, al final el fin justifica los medios. ¿Podríamos ser nosotros autosuficientes gestionando bien nuestros recursos? porqué no apoyamos al campo que es el último que nos queda.