Grupos como el GOB y algunas entidades sociales se han propuesto abordar el fenómeno de la saturación estival desde una perspectiva analítica. Otros, aparentemente menos organizados, se manifiestan abiertamente en contra del crecimiento del fenómeno turístico a raíz del volumen alcanzado este año, que ha sido más alto que nunca. Las pintadas en viejos edificios, ubicados camino de las playas de la costa sur de Ciutadella principalmente, sirven de valla publicitaria de esos mensajes, que han reaparecido con gran visibilidad en las últimas semanas.
El cambio de paradigma de los visitantes producido a raíz del mayor peso alcanzado por el turismo nacional desde los años de pandemia ha agravado la percepción de masificación por el mayor uso del vehículo particular en los desplazamientos. Los atascos en carreteras y caminos y la saturación de los aparcamientos costeros se han generalizado y han propagado esa imagen de masificación.
Son sensaciones confirmadas por la encuesta del IBES y presentes, por tanto, en la realidad turística, que ya no se ciñe solo a seis u ocho semanas centrales del verano.