Semana productiva en cuanto a energía renovable en Menorca. Tras el inicio de obras de la ampliación de Son Salomó II (50 MW) y la declaración de proyecto estratégico del parque solar de Qualitas en Maó (60 MW), este jueves la Comisión Balear de Medio Ambiente ha dado su visto bueno al parque solar proyectado en las fincas de Llinàritx Nou y Binisseguí en Es Mercadal (30 MW), lo que supone que en breve podría iniciar las obras el que será el tercer parque fotovoltaico más grande de Menorca. Para contextualizar la importancia de estos tres parques solo destacar que la potencia actual de energía renovable en Menorca no llega a los 8 MW.
La Comisión de Medio Ambiente ha concedido, con prescripciones, la declaración de impacto ambiental favorable al proyecto Menorca Renovable III, con el que el fondo de inversión Qualitas pretende instalar en una superficie de 24 hectáreas cercanas al polígono industrial de Es Mercadal hasta 60.000 placas solares. Se distribuirán en dos fincas con una potencia de 10 y 20 MW, con la correspondiente canalización para conectar la planta con una subestación colectora, junto a la subestación eléctrica de Es Mercadal. El presupuesto del proyecto asciende a 28,3 millones de euros.
La conformidad de Medio Ambiente supone un alivio para los promotores ya que este proyecto era uno de los que corría peligro de no ejecutarse, ya que si antes del 24 de enero no tenía aprobada la declaración ambiental perdía los derechos de concedidos por el Ministerio para poder volcar la electricidad en la red.
Salvado este escollo, ahora los promotores deben presentar el proyecto ejecutivo, con las prescripciones de Medio Ambiente, ante la Dirección General de Energía para que esta lo autorice. Y posteriormente solo quedará comunicar el inicio de obras. Una tramitación que «solo depende ahora de los promotores» apuntan desde la Conselleria de Transición Energética, que ve factible que su construcción pueda iniciarse este mismo año.
Las prescripciones
Medio Ambiente en su detallado informe sobre la declaración de impacto ambiental exige el cumplimiento de hasta 30 medidas, entre las que destacan que para compensar la pérdida de superficie agrícola deberá recuperar el uso agrícola de una parcela abandonada de un mínimo de 14.000 metros cuadrados. No puede afectar a especies de interés, debe prever posibles afectaciones al camino antiguo de Es Migjorn y a un tramo del Camí Reial, evitar el impacto visual de las placas desde el Camí d'en Kane, limpiar las placas en seco y pasados los 25 años de vida útil recuperar su estado original o si sigue en funcionamiento someterse a otra evaluación de impacto ambiental.