Hasta nueve calles de Es Mercadal y otra de Fornells estan siendo objeto de unas obras de rehabilitación para la mejora de los servicios básicos. El Ayuntamiento de Es Mercadal invierte 576.421 euros, para la adecuación de las redes de agua potable, pluviales, alcantarillado, hidrantes contra incendios y cruces eléctricos, y en superficie, empedrado nuevo y árboles.
En Es Mercadal, el proyecto servirá para renovar las calles Major, d'Enmig, Sant Joan, Ses Carnisseries, Pont de la Sala, Sant Martí, Sa Muntanyeta, des Forn, Plaça de l'Església y un tramo del Carrer Bisbe Sever. Mientras, en Fornells se actúa en el Carrer des Molí.
Antonio y Diego SA se encarga de los trabajos, que servirán «para sustituir las cañerías de PVC por otras de polietileno que soportan el doble de presión», explica el alcalde, Francesc Ametller, referido a unas obras «muy necesarias». «Separamos los pluviales del saneamiento», de forma que «el agua de lluvia irá al torrente a través de imbornales».
En el caso del Carrer Major, que fue reformado hará unas tres décadas, «hemos hecho varias reuniones con los vecinos y nos han pedido que la calle no quede igual que el Carrer Nou, sino que le demos una estética más acorde a su antigüedad, pues fue alrededor de esta calle, de la iglesia y el molino que se formó el pueblo». Es así que «la calle tendrá un aspecto similar al actual, pero sin las losas actuales, que resbalan con el agua».
Otra calle muy particular es la D'Enmig. En este caso seguirá «la misma línea que el Carrer Nou, con árboles y sin aparcamientos desde la farmacia a la Plaça Constitució», expone Ametller, que explica al mismo tiempo que se plantean restringir el paso de vehículos, aunque no de forma tan drástica como en el Carrer Nou. «Allí pueden pasar coches hasta primera hora de la mañana; en elCarrer d'Enmig, una propuesta es cerrarlo por las tardes, pero habrá que hablarlo con los comerciantes».
Las otras vías verán mejorados todos los servicios, incluida la plazoleta de la iglesia y las callejuelas más cercanas, y el Carrer Bisbe Sever «solo se cambian tuberías en un lado, se hará acera nueva y el empedrado no se tocará».
Por último, en el caso de Fornells, el Carrer des Molí tendrá un diseño continuïsta con la actual Plaça de l'Església, «con adoquinado pero sin árboles, porque es una calle estrecha», concluye el primer edil mercadalenc.
Las obras han empezado ya y el Ayuntamiento espera que estén concluidas antes del inicio de la próxima temporada estival. Es una inversión a través del Plan Insular para la Reactivación Económica en Materia de Sostenibilidad y Eficiencia Urbana, pues, entre otras cuestiones, permitirá «eliminar muchas fugas en la red de agua potable que muchas veces son imposibles de detectar».
El Ayuntamiento aporta el 45 por ciento del presupuesto, unos 263.000 euros, y el resto llega a través del Consell y el Govern balear.