La Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Menorca (Fampa) considera que la elección de la lengua en las aulas supone una segregación que, según manifiesta en un comunicado, atenta contra la equidad que debe vertebrar el sistema educativo.
La entidad apunta que, más allá de polémicas «estériles» sobre la lengua, el sistema educativo tiene que garantizar el conocimiento de las dos lenguas oficiales al finalizar la educación obligatoria.
En esta línea, destaca que «los estudios actuales y los expertos declaran que el desequilibrio socioeducativo entre el castellano y el catalán implica que los proyectos lingüísticos de los centros tengan que dedicar una mayor dedicación al catalán, si queremos garantizar el conocimiento de ambas lenguas».
Asimismo, muestra su preocupación por las consecuencias de las propuestas políticas sobre la «supuesta» libertad de elección de lengua. «Lo que en un principio era elección de la lengua de aprendizaje de la lectoescritura, en palabras del conseller de Educación, ha pasado a ser la elección de la primera lengua en el primer ciclo de Primaria, para acabar a ampliarse en todas las etapas educativas», critica.
La federación remarca que la elección de lengua sólo se puede llevar a cabo «segregando al alumnado en función de la lengua elegida o duplicando a los docentes dentro del aula, lo que también implica una segregación funcional». «Está demostrado que cualquier clase de segregación tiene consecuencias sociales, y en particular la segregación por razón de lenguas atenta contra la cohesión social y la convivencia», manifesta la entidad que agrupa a las asociaciones de la Isla.
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