El presidente del Consell insular, Adolfo Vilafranca, ha apelado este miércoles al diálogo y a la unidad política en el pleno extraordinario celebrado con motivo de la festividad de Sant Antoni. Un llamamiento que ha cobrado una significativa relevancia dado que el PP gobierna en minoría en la institución insular, una vez que Vilafranca cesó el pasado mes de noviembre a la consellera de Vox Maite de Medrano como responsable de Vivienda y Agenda Urbana.
Adolfo Vilafranca ha señalado que la celebración de la fiesta del patrón de Menorca, Sant Antoni, ha invitado a poner en valor la historia colectiva, la tradición y la cultura de los menorquines, surgida a raíz de la reconquista cristiana de la Isla por el rey Alfonso III de Aragón en 1287, que ha marcado el final de la dominación musulmana y el inicio de una nueva era con la integración definitiva en el mundo occidental. «La Isla ha sido poblada por diferentes civilizaciones y culturas, y eso nos ha dado una identidad única. Somos hijos y nietos de todos ellos. Los menorquines hemos sabido unirnos en las adversidades y en las celebraciones, hemos sabido trabajar para construir un futuro mejor para todos. Esta unión es nuestra fuerza. Es lo que nos hace diferentes y especiales. Es lo que queremos potenciar», ha asegurado.
El presidente ha incidido en el trabajo conjunto y en el diálogo como elementos clave para la consecución de los objetivos que han reportado el progreso de Menorca. Así, ha recordado la declaración de la Isla como Reserva de Biosfera en 1993 y Menorca Talayótica como Patrimonio Mundial el pasado mes de septiembre. Ambas distinciones de la Unesco nos remiten a lo mismo: al desarrollo sostenible a nivel económico y medioambiental, cultural y de bienestar social. Es el equilibrio entre todos los factores nuestra seña de identidad. Es lo que nos hace brillar internacionalmente y lo que mejor explica quienes somos y quienes queremos ser en el mundo del siglo XXI», ha apuntado.
Vilafranca ha abogado por garantizar los recursos naturales para las actuales generaciones y las futuras, destacando el reto de resolver la problemática del agua a partir de la acción conjunta de los ayuntamientos, Consell y Govern balear, y de continuar apostando por la sostenibilidad y el reciclaje. «Una de las primeras medidas que hemos adoptado este pasado verano ha sido adaptar las necesidades de los ciudadanos a la recogida puerta por puerta, con un resultado aceptable donde ya se ha implantado la recogida selectiva, al pasar la tasa de reciclaje del 20 al 80 por ciento», ha subrayado.
Ha remarcado el compromiso del Consell con la sociedad del bienestar y con las personas más vulnerables, la apuesta por la gratuidad de la educación de 0-3 años -«con la aportación más alta de la historia del Consell en materia», ha señalado-, la reforma de la casa de la Infancia y la mejora de la atención a las personas mayores en un contexto de una población cada vez más envejecida.
Vilafranca ha destacado la necesidad de generar oportunidades para los ciudadanos y las condiciones necesarias para facilitar el crecimiento de las empresas y el avance hacia la diversificación, buscando un turismo sostenible que conecte con la esencia de Menorca. Tampoco ha olvidado el sector primario y la necesidad de contar con infraestructuras adecuadas para procesar los alimentos que se consumen. «Hemos de continuar apoyando nuestro producto local y nuestra riqueza gastronómica para avanzar en la economía circular, sin olvidar la viabilidad de las explotaciones, lo que implica mejorar procesos y poder cobrar un precio justo para la leche, sin perder de vista la rentabilidad de las empresas transformadoras», ha señalado.
Además, el presidente del Consell ha solicitado al Estado la mejora de la Obligatoriedad de Servicio Público con Madrid, la necesidad de mejorar la conectividad aérea y un nuevo convenio de carretera, además de destacar la urgencia del desarrollo del reglamento del REB.