A la espera de hallar una nueva familia de acogida, algunos menores viven en un piso tutelado mientras que otros residen en la Casa de la Infancia de Maó, la cual será reformada próximamente para que sea «lo más parecido a un hogar».
Además, con el propósito de mejorar la atención personalizada, la consellera de Bienestar Social, Carmen Reynés, aseguró que ya están manos a la obra para tener «dos centros diferenciados según las necesidades y las edades» de cada uno de los menores y así poder realizar «un mejor acompañamiento». A fin de llevar a cabo este cometido, están pendientes de «firmar un convenio» con el Ayuntamiento de Maó para la búsqueda de otra casa «más adecuada». «Una vivienda más grande y con patio mejoraría las condiciones de los menores», afirmó la consellera.
Ayudas económicas
Cabe recordar que cada familia que dé el paso de acoger, contará con el apoyo técnico de psicólogos y educadores sociales, además de una compensación económica estipulada por el Consell que varía según el perfil de la correspondiente familia de acogida: para aquellas que acojan a un solo menor, la cuantía está fijada en 441,62 euros. Si acoge a dos o más menores, esta se reduce a 395,62 euros por menor. En cambio, para las familias de acogida especializada y de urgencia asciende a los 945,48 euros.
Llegint la notícia el que cerquen són famílies d'acollida per garantir el dret que tenen els infants de viure en una família i el dret de garantir un entorn segur i estable que puguin tenir un desenvolupament a tots els nivells i poder reparar el dany i poder mantenir la relació amb els seus pares.