El Consorcio de Residuos y el Ayuntamento de Maó han advertido a los vecinos de urbanizaciones como Binixíquer o Es Canutells que se exponen a multas de entre 750 y 3.000 euros si persisten en la práctica de dejar en la vía pública bolsas de plástico con los restos de poda de jardines sin hacer uso del servicio de recogida con cita previa.
La situación, que se viene detectando en los últimos meses, ha supuesto la aparición de diferentes puntos de vertido incontrolado de residuos vegetales que quedan en la calle sin recoger durante días, ya que el servicio de retirada se organiza en función de los usuarios que sí piden la cita.
Después de enviar varios avisos e informar a los vecinos de la zona, el Consorcio de Residuos en coordinación con el Ayuntamiento de Maó, el servicio de inspección y la policía local, ha realizado visitas domiciliarias para advertir sobre posibles sanciones económicas en el caso de que estas incidencias se mantengan en el tiempo.
Esta práctica, apunta la administración en una nota pública, además de ser un acto incívico que genera molestias al resto de los residentes puede comportar un mayor riesgo de incendios.
Cómo funciona la cita previa
El servicio de recogida de voluminosos y restos vegetales es un servicio gratuito proporcionado por el Consorcio y los ayuntamientos de Maó y Es Castell que funciona con cita previa telefónica. En el momento que se solitica, los técnicos indican al usuario en qué momento y de qué manera pueden depositar los residuos delante de su casa para que se efectúe su recogida. En ningún caso se pueden abandonar los residuos de poda sin cita previa.
Si la poda ha sido efectuada por una empresa de jardinería, ésta está obligada a transportar los residuos generados hasta la ‘deixalleria'.