El Ministerio de Defensa emitió este sábado por la mañana un comunicado, muy escueto, sobre la presencia de la OTAN en la base naval del puerto de Maó en el que asegura que en estos momentos, literalmente, «no existe previsión alguna de que el territorio balear asuma ser base naval de la organización, más allá de su papel actual como puerto puntual de escala para las flotas permanentes de la Alianza».
El departamento que lidera Margarita Robles responde así a la información divulgada en la edición del viernes del diario «El País», y que tuvo una enorme repercusión mediática, así como diversas reacciones tanto en la Isla como fuera de esta. Distintas fuentes han señalado, de hecho, a «Es Diari» que el estatus del puerto de Maó en relación a la OTAN no ha cambiado en los últimos meses y que, en ningún caso, se prevén cambios en sus infraestructuras que le asemejen, por citar un ejemplo, a la base que utiliza la organización internacional de defensa en el puerto de Rota.
Sí que se ha establecido una especie de cambio normativo, procedimental, o nuevo protocolo por el cual se ha agilizado, se ha hecho más fluido, este uso de la base naval de Maó como estación de apoyo para algunas misiones del Mediterráneo, como ya sucedió, por ejemplo, a finales del mes de abril del año pasado. Cabe recordar, como se informó ayer en este diario, que el próximo día 8 de abril se espera en el puerto de Maó la llegada de la fragata «Navarra», en el marco de la operación ‘Sea Guardian' que lleva a cabo la OTAN.