Las líneas amarillas que han sido protagonistas del asfalto en la carretera general entre Maó y Alaior, entre los enlaces de L'Argentina y Rafal Rubí, han pasado a mejor vida 10 años después, una vez concluida la variante que elimina el giro e la izquierda para acceder a esta urbanización de Alaior.
Durante ese tiempo, en teoría, las líneas amarillas impedían circular a más de 70 kilómetros por hora. A finales de la semana pasada las líneas amarillas fueron repintadas con las de color blanco que vuelven a permitir aumentar la velocidad a 90 km/h.
Las obras de este tramo se iniciaron el 25 de septiembre de 2014 cuando Luis Alejandre era conseller de Movilidad, con un plazo de ejecución de dos años. Luego llegaría el gobierno de izquierdas que paralizaría las obras y la rescisión del contrato con la UTE que las había iniciado. Se reanudaron en septiembre de 2022 y concluyeron en el último trimestre del pasado año.
10 años y la carretera sin acabar y un montón de dinero tirado... Vergüenza me daría...