El PSOE presentará mociones en todas las instituciones de Menorca para denunciar la «violencia verbal y física» de miembros de la derecha y ultraderecha, tras el último incidente protagonizado por el concejal de X Balears, Jorge de Diego, contra los representantes de la oposición en Sant Lluís.
A través de un comunicado, el PSOE ha mostrado su preocupación por el «escándalo» protagonizado por De Diego y ha denunciado públicamente las «actitudes autoritarias y agresivas» que están adoptando los gobiernos de derecha, «una dinámica que se reproduce a nivel nacional y que se multiplica a nivel autonómico, insular y local».
Los socialistas advierten de que «la falta de respeto y de tolerancia no tienen cabida en las administraciones» y proponen «tomar decisiones contundentes, a la altura de lo que se espera de los responsables públicos».
A modo de ejemplo, recuerdan los casos protagonizados por el presidente del Parlament Balear, Gabriel Le Senne (Vox), el director insular Mateu Aínsa y el conseller Simón Gornés (PP), así como Antoni Riera, miembro de la junta local de Fornells.
«Todos estos casos tienen un denominador común: la violencia verbal y física acompañada por el silencio cómplice del PP, una peligrosa escalada de hostilidad y enfrentamiento que no solo perjudica el clima de respeto y diálogo sino que, también, alimenta la polarización de la sociedad», lamenta el PSOE.
El PSOE considera «inaceptable que los cargos públicos con responsabilidad de representar a los menorquines usen a conciencia su posición pública para fomentar la división, el odio y la confrontación».
El partido exige «más sentido común, responsabilidad y coherencia» frente al «lenguaje despótico, autoritario y agresivo» que percibe en estos gobernantes y que «solo contribuye a distorsionar el debate y desviar la atención de los problemas reales que afectan a la sociedad».
El partido anuncia la presentación de mociones «a todos los niveles, para reprobar estas actitudes y reconducir los malos comportamientos de estos cargos que, a ojos de los socialistas, no pueden quedar impunes